Las nueve musas
Kurth Pahlen By Robert Schediwy

Lo único que queremos

Promocionamos tu libro

 En estos tiempos pandémicos, en los que parece que más que nunca no tendremos espacio y apoyo para la cultura ni las artes escénicas, a pesar de que el confinamiento demostró que no puede sobrevivirse a él sin ellas, me parece muy oportuno recordar este texto, escrito hace varios años, pero cuya vigencia me lleva a una reflexión más que necesaria en nuestros días.

Por supuesto esto está escrito desde una perspectiva completamente personal y en ningún momento intenta idealizar la precariedad de la labor artística, pero sí explicar su naturaleza vivida desde la vocación personal.

Uno de mis sabios favoritos, Kurt Pahlen, escribió:

Si echamos un vistazo a una de las centenares de escuelas de música donde el canto se enseña “hasta la perfección” nos apercibimos con sorpresa de la existencia de tan excelente “material”, de tantas, bellas y a veces, deslumbrantes voces. Nos asombra tanto esfuerzo, tanta lucha por una carrera que está dentro de las más difíciles; tanto amor, tanta entrega a una profesión que no promete éxitos seguros, tanta fe, tanta esperanza.

Lo dificultoso de ese camino sería fácil comprobarlo mediante los números. Quien se hace aprendiz de albañil será un día, con cierta seguridad albañil. Quien se inscribe en una escuela de comercio tendrá un empleo donde utilizará los conocimientos allí adquiridos. Quien en cambio se hace cantante, camina hacia lo incierto. Para su carrera sólo hay posibilidades, ninguna seguridad; las reglas se anulan con una enorme cantidad de excepciones. Sólo le es permitido abrigar esperanzas, sentir la nostalgia de hallarse algún día “arrib”’, en la luz, quizá la gloria, la fama. Ha de trabajar incansablemente en su perfección, con una intensidad que quizá sólo la conocen los artistas y los creadores, día a día, noche tras noche.

Pero no les queda elección posible. Por que quien es capaz de elegir, no es artista.[1]

Y yo estoy segura de ello.

Mis amigos artistas y yo misma, sabemos que somos capaces de todo (dejar marido, cambiar de país, pasar estrecheces económicas, olvidarnos de nuestra insegura vejez) por poder dedicarnos a lo que somos. Porque el problema es que eso es lo que somos, no lo que hacemos ¿Seríamos los mismos si no escribiéramos, actuáramos o creáramos? ¿Sería yo quién soy sin ópera?

Lo único que puede hacernos felices de verdad es crear y lo único que buscamos es la manera de poder hacerlo. Nuestro sueño más profundo es no tener que hacer otras cosas para vivir y poder dedicarnos a lo que necesitamos hacer. Porque no es lo que queremos hacer, ni es lo que deseamos muchas veces, es lo que necesitamos hacer. Quizá esa sea la única real diferencia entre nosotros y el resto de la gente: nuestro oficio nunca es una profesión, es una manera de vivir.

Oír a una directora de escena eufórica porque va a dirigir sin presupuesto, a un escritor encantado porque va a escribir un blog gratis o a un actor que se esfuerza para un trabajo que nunca le pagarán, es una de las miles de cosas que cuesta mucho entender de este mundo.

Darío Fo
Darío Fo

Intentado dar una explicación, podemos dejar claro que el vacío de la vida nunca podrá llenarse con personas o cosas para alguien que necesita describirlo en un cuento o pintarlo o esculpirlo. La tranquilidad de la vida no llegará con una pensión o un techo seguro. La felicidad no se encuentra en la relación amorosa o en el mundo perfecto.

Cuando hemos podido hacer que nuestro mundo interno se plasme fidedignamente, cuando podemos provocar que el otro se piense a sí mismo y a la realidad que le rodea de otra manera, cuando  podemos incitar a otros a crear, es cuando realmente seremos felices, estaremos pagados y podremos morirnos con la conciencia tranquila.

Cuando trabajé con Dario Fo en el montaje de La gazzetta de Rossini en el Liceo de Barcelona, aprendí lo que realmente significaba mi trabajo. Él, saltándose las normas, había metido al ensayo pre general de la ópera a dos señores italianos que encontró en el café del teatro y que le habían dicho que no habían podido comprar entradas para ver la función. Cuando salieron llevaban la mirada iluminada y habían pasado de la decepción a la felicidad completa. Yo me acerqué al Mtro. Fo y le dije: «Maestro, ¡les cambió la vida!» y él con infinita sabiduría me dijo: «¡Claro! Mi trabajo no es ganar el premio nobel, ni dar entrevistas. Mi trabajo es cambiarle la vida a la gente» y entonces entendí por qué era un artista de magnitudes asombrosas.

Hacemos arte porque lo necesitamos, ¿por qué no sabemos hacer nada más? en algunos casos, pero en la mayoría creo no equivocarme al decir que lo hacemos porque, de todo lo que sabemos hacer, eso es lo único que de verdad necesitamos realizar.

No es que nos satisfaga, la mayor parte del tiempo no lo hace, pero hay un día -cuando ves las lágrimas en un espectador, cuando oyes cambiar la respiración de quien te escucha, cuando ves que tu trabajo de hace años tiene resultados ahora, cuando, pese a todo y contra todo, eres capaz de crear un minuto de belleza-  en que  todo tiene sentido y sabes que hay una misión cumplida, has hecho lo que tenías hacer.

Por eso mi petición a todas las instituciones culturales del mundo, a todas las familias que regañan a sus hijos por querer ser artistas, a las instituciones que censuran la libertad de expresión, en fin, a todos los que no apoyan nuestro trabajo: Por favor, déjenos hacer lo que sabemos hacer.

Sólo eso y Todo eso.

[1] Pahalen, Kurth. Grandes cantantes de nuestro tiempo. Buenos Aires: Emecé editores, 1973. Pag. 12

Última actualización de los productos de Amazon el 2023-06-06 / Los precios y la disponibilidad pueden ser distintos a los publicados.

Enid Negrete - Ópera

Enid Negrete

Enid Negrete se ha formado profesionalmente tanto en el medio musical como en el ámbito teatral. Es Doctora en Artes Escénicas por la Universidad Autónoma de Barcelona. Reside en esta ciudad desde hace quince años, donde ha trabajado como productora y directora de escena de teatro y ópera, así como especialista en archivos operísticos, crítico, profesora y articulista.

Como investigadora fue la primera en estudiar los archivos históricos de los dos teatros más importantes de ópera de España: El teatro Real de Madrid (actualmente consultable en el Institut del Teatre) y el Archivo histórico de la Sociedad del Gran Teatro del Liceo de Barcelona (en proceso de digitalización por la UAB). De 2013 a 2016 fue investigadora invitada del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información “Carlos Chávez” del Instituto Nacional de Bellas Artes de México, donde realizó el diseño de la primera línea de investigación de la ópera en México.

Desde el año 2006 ha colaborado en diferentes publicaciones especializadas en ópera, música clásica y artes escénicas, tales como Ópera Actual, Opus Musica, La onda, Revista ADE de la Asociación de Directores de Escena de España, Heterofonía y Recomana.cat.

Actualmente es la presidenta de la Fundación Arte contra Violencia dedicada a apoyar a los artistas de escasos recursos, dar formación profesional y difundir el arte mexicano en Cataluña.

Publicamos tu libro (

Añadir comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

  • Cuando crecen las sombras

  • Negro después del negro
  • palabras
  • Las vírgenes confinadas
  • Tejiendo sueños y realidades
  • Dadme a vuestros rendidos
  • La ciencia no es asunto de dioses
  • Las bestias nazis
  • La herida narcisista
  • Espacio disponible para tus productos o servicios
Las nueve musas ediciones

Your Header Sidebar area is currently empty. Hurry up and add some widgets.

Apadrina a un redactor